Cómo la elección correcta de tecnología aumenta los beneficios de tu negocio

Cuando encargas un sitio web, esperas que sea un motor para tu negocio: que atraiga clientes, impulse las ventas y agilice los procesos. Pero para que eso ocurra, la clave está en elegir bien la tecnología que lo sostiene. Como desarrollador web, me encuentro a menudo con preguntas como: "¿Por qué no usar un constructor como Wix?" o "¿Por qué no WordPress?". Vamos a desmenuzarlo paso a paso y a ver por qué, para la mayoría de los proyectos, mi equipo en Zaltsman Media y yo apostamos por Laravel y cómo esto beneficia a tu negocio.

Constructores: Rápidos, pero no para jugársela

Los constructores como Wix, Tilda o Webflow tienen su encanto: son fáciles de usar y te permiten tener un sitio en marcha en un abrir y cerrar de ojos. Son perfectos si quieres probar una idea o montar un landing temporal. Pero para un negocio serio, se quedan cortos. Aquí van las razones:

• SEO y velocidad: Los sitios hechos con constructores suelen cargar como tortugas por culpa de un código mal optimizado y una infraestructura compartida. Por ejemplo, un sitio en Wix puede tardar 2 o 3 segundos más en cargar que uno hecho a medida, y eso recorta la conversión un 70% (dato de Google). Tienes tres segundos para enganchar a un usuario antes de que se largue para siempre. Si dos de esos segundos se los pasa mirando una pantalla en blanco, olvídate de vender. Además, el SEO es un dolor: los buscadores no los quieren tanto como a las soluciones personalizadas.
• Dependencia total: Tu sitio no es tuyo al 100%. Si el constructor cambia algo o cierra el chiringuito, te quedas con el agua al cuello. En 2023, por ejemplo, Tilda renovó sus animaciones y muchos sitios se fueron al garete; las empresas perdieron clientes hasta que lo arreglaron.
• Límites por todas partes: Olvídate de integraciones complejas o sistemas de gestión avanzados. Si tu negocio crece, el constructor se te queda pequeño más rápido que un traje viejo.
• El precio real: Aquí viene lo gordo: si dejas de meterle dinero a la publicidad online, el flujo de clientes se seca al instante. Y ojo, que anunciar un sitio mal hecho sale más caro que uno bien parido.

No trabajo con constructores porque mis clientes vienen buscando soluciones de fondo, no parches para salir del paso. Un constructor es como alquilar un piso en el Raval: está bien para empezar, pero no puedes tirar paredes ni hacerte la casa a tu medida.

WordPress: El rey de los blogs, pero no de todo

WordPress es un clásico que empezó como herramienta para blogueros. Hoy lo usan para casi cualquier cosa, pero para proyectos con enjundia, no da la talla. ¿Por qué?

• Velocidad a trompicones: Para que WordPress haga algo útil, hay que cargarlo de plugins. Por ejemplo, si quieres varias lenguas, tiras de WPML y el sitio se arrastra como caracol. Con 20 plugins, puedes esperar 5 segundos de carga, mientras que un desarrollo a medida te lo planta en menos de 1. Eso espanta usuarios y hunde tu posición en Google.
• Seguridad en jaque: Su fama lo hace un imán para hackers. En 2022 se contaron más de 1000 agujeros en sus plugins. Un descuido y te cuelan un gol por la escuadra.
• Gestión infernal: Hace poco rehicimos una tienda online en WordPress donde la pantalla de administración tardaba 30 segundos en despertar. Añadir un producto era como pedir cita en el CAP: lento y desesperante. El cliente perdía el tiempo peleándose con el sistema en vez de hacer crecer su negocio.

WordPress mola para un blog sencillo o una web de andar por casa, pero si buscas una herramienta para tu negocio, acaba siendo un lastre más que un aliado.

Laravel: Tu negocio merece algo a medida

Frente a constructores y WordPress, nosotros solemos tirar de Laravel, un framework potente para desarrollos personalizados. Mira cómo le saca partido a tu negocio:

• Flexibilidad total: Con Laravel, tu sitio se cose a la medida de tus necesidades. Por ejemplo, para una tienda online, te montamos un sistema de pedidos que encaja con tu logística y tu contabilidad como anillo al dedo. Sin florituras inútiles, solo lo que te hace falta.
• Rápido como el AVE: Los sitios en Laravel vuelan y aguantan miles de visitas sin despeinarse. Tus clientes flipan con la velocidad y los buscadores te suben al podio.
• Blindaje incluido: Laravel te cubre las espaldas contra amenazas como inyecciones SQL o ataques XSS con sus defensas integradas.
• Control sin dramas: Te damos interfaces tan claros que hasta tu abuela podría gestionarlos. Añades contenido o manejas el sitio sin volverte loco con manuales.

Fíjate en esto: el panel de control de un sitio puede ser el caos o un paseo. A la izquierda, WordPress es como el mercadillo de Els Encants un sábado: un lío donde encontrar el botón para subir un producto es una odisea entre mil trastos. A la derecha, lo nuestro con Laravel: orden, claridad y sentido común. Publicas algo en un minuto sin maldecir la pantalla como si fuera el enemigo.

Pero lo mejor no es solo la tecnología. Apostar por Laravel es trabajar con gente que entiende tu negocio. En Zaltsman Media no solo picamos código; optimizamos procesos, integramos pagos y envíos, y te echamos un cable con temas fiscales y legales en Europa. Somos tus socios, no solo tus currelas.

¿Por qué no eliges tú la tecnología?

Quizá te preguntes: "¿Y por qué no decido yo?". Imagina que vas al médico y le dices qué pastilla te tiene que recetar. Lo normal es que confíes en el doctor, que sabe lo que te conviene. Pues esto es igual: elegir tecnología es cosa de desarrolladores. Nosotros preguntamos, escuchamos y te traemos la solución que resuelve tu marrón con nota.

Cada proyecto es un mundo. Dos ideas que parecen primas hermanas pueden necesitar enfoques distintos. Como expertos, vemos lo que tú no: desde el esqueleto del código hasta cómo escalará mañana. Queremos que tu sitio sea tu mejor empleado, no un jefe que te mande a ti.

No todos los desarrolladores son iguales

En el mercado hay mucho “maestro” de WordPress que monta sitios con plantillas y plugins sin tocar una línea de código. Te hacen algo aparente, pero no lo adaptan a lo que tu negocio pide de verdad ni lo tocan cuando el equipo de marketing quiere subir conversiones.

Los que trabajamos con Laravel somos programadores de verdad: creamos desde cero, escuchamos al cliente y aportamos ideas. No te damos un sitio, te damos una herramienta para comerte el mercado.

Conclusión

Elegir tecnología no es un detalle, es una jugada maestra para tu negocio. Los constructores como Wix o Tilda valen para un apaño, pero no para crecer. WordPress está bien para un diario online, pero se ahoga con tareas grandes. Laravel es el traje a medida: rápido, seguro y flexible.

Si nos dejas escoger, no solo tendrás un sitio; tendrás un equipo que entiende tu negocio y lo impulsa. ¡Hagamos que tu proyecto despegue juntos!